Barrio Viejo por Cejas Magalí, Ojeda Agustina

Había una vez un adolescente que amaba la música. Vivía en un barrio de la ciudad de Inglaterra donde a la gente le molestaba el volumen alto.

Un día por la mañana muy temprano, puso la música muy alta, entonces sus vecinos muy molestos llamaron a la policía. Estos llegaron a su casa y le pidieron que bajaran el volumen de la música, porque a sus vecinos les molestaba.

El adolescente bajó la música y esperó que los policías se fueran, para hablar con sus vecinos y así lograron llegar a un acuerdo. Él solo le pidió que escucharan una letra, que contaba lo que estaba ocurriendo. Los vecinos muy amables aceptaron la propuesta y escucharon el tema. Fue ese momento cuando se dieron cuenta que la música no solamente era ruido, sino que era poesía, representada en melodía.

Finalmente, los vecinos acordaron que el chico podría escuchar música cuando quisiera.

Cejas Magalí 

Ojeda Agustina