viernes, 1 de octubre de 2010

REGALOS DE LA VIDA Virginia Castilla




Esta anécdota empezó el día 28 de agosto de 2008 cuando en 9º año de la secundaria de la escuela Nº 4-098 República del Perú, conocí realmente a una personita muy especial llamado Luis Martín. En realidad ese día me puse de novia con él y hasta hoy día sigo con esa persona amándolo.
Más allá de las típicas peleas de adolescentes, por celos y demás cosas, hasta el día de hoy todo sigue como si fuese el primer mes de noviazgo.

Nuestros corazones están llenos de amor como lo han estado durante estos dos años.
El conocer una persona así, me llevó a hacer a un lado muchas cosas, que en realidad no tenían demasiada importancia en mi vida y algunas que yo decidí dejarlas por nuestro bien.
A pesar de las peleas que habitualmente tenemos, el amor crece día a día y cada vez se hace más fuerte.

Hemos hecho planes como toda pareja de novios y hemos jurado cumplir con todos nuestros sueños y planes del futuro.
Gracias a Dios todavía quedan personas con amor, que quieren entregárselo a alguien y poder ser felices, luchar contra todo lo malo caminando de la mano del otro y estar cuando se necesitan.
En fin... yo tuve la suerte de encontrar a una de esas personas. Sí... aunque no lo crean es un ser maravilloso, hermoso que lo único que hace es buscar nuestra felicidad cada segundo.
Tengo que estar muy agradecida con la vida, por haberlo encontrado, tenerlo a mi lado para que me acompañe siempre en todo. Debo admitir que si bien tenemos peleas, siempre después de una tormenta sale el sol ¿no?.
Lo más importante es que siento un gran amor por él. Esta pequeña historia, grande a la vez es parte de la historia que vivo día a día.
“Aunque creas que algunas cosas son imposibles,
no debes dejar de luchar por encontrarlas”.

AUTOR: CASTILLA VIRGINIA

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